Tabla de contenidos

El divorcio notarial es un proceso legal que se puede llevar a cabo ante notario, en lugar de acudir a los tribunales. Este tipo de divorcio ofrece una serie de ventajas, como la rapidez y la simplicidad del trámite, frente a procesos de divorcio judiciales donde se puede dilatar mucho en el tiempo llegar a un acuerdo entre ambas partes. En este artículo, te explicaremos qué es el divorcio notarial, cuáles son los requisitos para llevarlo a cabo en España y cómo se tramita.

¿Qué es el divorcio notarial?

El divorcio notarial es un procedimiento que permite a las parejas poner fin a su matrimonio de forma rápida y sencilla, sin necesidad de acudir a los tribunales. En lugar de un juez, es un notario quien se encarga de validar el acuerdo de divorcio, siempre y cuando ambas partes estén de acuerdo en poner fin a su matrimonio.

Requisitos para el divorcio notarial en España

Para poder optar por un divorcio notarial en España, es necesario cumplir una serie de requisitos:

  • El matrimonio debe tener una antigüedad superior a 3 meses.
  • No tener hijos menores de edad, o mayores con discapacidad o incapacidad.
  • Si se tienen hijos mayores y no emancipados, o menos emancipados, deben dar su conformidad con lo que les afecte en el proceso de divorcio ante notario.
  • Debe existir mutuo acuerdo entre ambas partes para disolverlo.

Documentación necesaria para divorciarse ante notario

Para llevar a cabo un divorcio notarial, es necesario presentar una serie de documentos tales como:

  • DNI de cada cónyuge.
  • Certificado de matrimonio.
  • El convenio regulador donde se establezcan los acuerdos sobre bienes comunes y demás términos relacionados con el matrimonio. Aquí es donde aparece la figura del abogado para divorcios, que puede ser muy útil para redactarlo rápido, y atender y mediar entre ambas partes.
  • Libro de familia.
  • Si hay hijos comunes, también se deben apartar sus certificados de nacimiento.

¿Cómo se tramita el divorcio notarial?

El proceso de divorcio notarial comienza con la presentación de la demanda de divorcio ante el notario. Antes de este primer paso hay que buscar un buen abogado que pueda gestionar el caso y mediar si hay alguna pequeña disonancia entre ambas partes.

  1. Una vez que ambas partes tengan todo claro, se redacta el convenio regulador y se procese a su firma.
  2. Con este y todos los documentos necesarios, se lleva ante notario y se presenta la demanda de divorcio ante notario.
  3. El notario dará fe de su validez y firmará el acta de divorcio, que tiene la misma validez que si se hubiese celebrado un juicio para conseguirlo. Este remitirá el documento al Registro Civil.
  4. Si hay bienes que repartir, también quedarán en el registro inscrito y habrá un plazo de 30 días para liquidar el impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentales, desde que se otorgan las escrituras de divorcio.

Ventajas del divorcio notarial frente a otros tipos de procedimientos

El divorcio notarial ofrece una serie de ventajas frente al divorcio tradicional ante un juez, porque es un trámite mucho más rápido que un proceso judicial, es mucho más privado, y al redactar el convenio regulador de mutuo acuerdo hay mayor flexibilidad para que ambos cónyuges queden satisfechos. Es en realidad muy similar al procedimiento de divorcio express, solo que aquí es un notario quien da fe de que ambas personas quedan divorciadas.

En conclusión, el divorcio notarial es una opción legal y efectiva para poner fin a un matrimonio de forma rápida y sencilla. Si estás buscando una forma ágil de divorciarte en España, te recomendamos considerar el divorcio notarial. En Liberados, contamos con un equipo de expertos en derecho de familia que pueden asesorarte y guiarte en todo el proceso de divorcio notarial. ¡Ponte en contacto con nosotros para más información!